jueves, 24 de junio de 2010

Historia de Camilo


Un día domingo 20 de septiembre de 2009, mi marido me mira y me dice "estas embarazada", yo aunque esperaba que así fuera, quede incrédula ante la situación; no fue si no hasta el día miércoles 23 de septiembre que confirmamos el embarazo mediante un test. Fue una felicidad tremenda solo había pasado un mes desde que decidimos tener un segundo hijo, un hermanito para Diego.

Todo iba bien sin mayores complicaciones, lo normal en un embarazo solamente, en diciembre entre la navidad y año nuevo nos confirmaron que definitivamente tendríamos un niño, al cual llamaríamos Camilo, le decíamos a diario a Diego que tendría un hermanito, que estaba en la guatita de mamá y que pronto vendría a casa para jugar con él.

Los meses pasaron rápido teníamos 21 semanas de embarazo, era un miércoles 27 de enero, el doctor nos realizo una ecografia para saber si estaba todo bien, pues había estado con pequeñas contracciones, pero nos encontramos con una gran sorpresa camilito tenia problemas en el corazón y los riñones; el doctor nos recomendó esperar hasta las 25 semanas para realizar una nueva ecografia, esta vez seria una 4D, con la cual sabríamos definitivamente que pasaba. Así llego el dia miércoles 24 de febrero, íbamos muy emocionados, al fin conoceríamos a Camilo, pero a la vez muy asustados por lo que nos pudieran decir. Finalmente el doctor confirmo una cardiopatía severa en camilo, con mi marido lloramos, pero teníamos fe, haríamos todo lo que tuvieramos que hacer para salvar su vida, la cardiopatía era operable, de todas maneras tendríamos que realizar una ecocardio con otro especialista para ver la gravedad del asunto.

Finalmente llego el día del ultrasonido, un viernes 5 de marzo de 2010, nunca podre olvidar ese dia, ni al doctor, porque lo odie durante mucho por la forma de decirme las cosas, ahora entiendo que era necesario. Me acompañaron mi marido, mi hijo y mi mamá. Desde un principio me sentía inquieta porque revisaba con detalle su cabeza, sus manos, sus pies y finalmente se dedico al corazón. llamó a mi ginecólogo y empezaron a hablar en voz muy bajita, ahí fue donde estalle en llantos y comenzaron a decirme que camilo tenia un par de cosas más que indicaban un problema más severo aún. Mi ginecólogo una vez terminado el ultrasonido me llevo a su consulta y me explico que con los nuevos hallazgos era necesario realizar una amnicentesis, el cual básicamente consiste en extraer liquido amniótico del vientre y analizarlo, aquel examen era disicivo, pues detectaria alguna crosomopatia, en nuestro caso habían dos opciones una trisomia 13 o una 18. En eso momento no sabiamos nada al respecto sobre estos dos síndromes, solo entendimos que camilo no tenia posibilidades de vida, el doctor dijo "ambos son incompatibles con la vida". Ese momento fue de desesperacion, angustia, no entendía como todos tan fríamente nos daban una noticia así, como mi hijo, el cual se movía tanto, podía estar enfermo y porque nos pasaba esto nosotros..............

El miércoles 10 de marzo realizamos la amnio, tendríamos que esperar al menos 15 días para un preinforme, fueron dos semanas horribles, llenas de ansiedad y angustia, rogábamos un pequeño milagro, que no fuera nada cromosomico y pudieran operarle su corazón. Finalmente el viernes 26 me contacte con mi dr. y me dijo que ya tenia los resultados que debíamos conversar, me fui volando a la clínica y no podía creer lo que pasaba, mi pequeño tenia una trisomia 13 traslocada en el cromosoma 10 llamado sindrome de patau, a esa altura ya había averiguado en Internet, por lo tanto, sabia lo que ocurriría, pero no podía creerlo, pensé que me iba a volver loca, que no podría resistir tanto dolor, tenia 29 semanas de embarazo y no sabia que pasaría con mi bebe.............la mayoría de los niños con esta trisomia nacen muertos o se pierden en el transcurso del embarazo, la minoría logra nacer pero viven muy poco, nos hablaron de horas, con suerte un par de días, nos dijeron que tendríamos que ser pacientes y esperar.................

Comenzaron muchas dudas sobre que era lo que teníamos que hacer, como conectarlo a maquinas que le ayudaran a vivir mas tiempo y en el fondo exigir que se le tratase como a cualquier prematuro, queríamos luchar por su vida y el no hacer nada, era dejarlo morir. Fuimos donde una genetista y nos explico que cualquier procedimiento solo alargaría su agonía, que este síndrome trae consigo muchas mal formaciones que impiden que el cuerpo funcione adecuadamente, por lo mismo desistimos, no queríamos que sufriera, decidimos estar con el todo el tiempo posible, el tiempo que pudiese soportar su cuerpecito, el tiempo que dios quisiera prestarnos a nuestro pequeño ángel.

Ya faltando poco para su nacimiento me sentía más tranquila y positiva, sentía que lo íbamos a lograr, que mi hijo seria uno de esos casos médicos para revistas, había visto en Internet que habían niños de más de 1 año con esta enfermedad, sentía que camilo iba a estar muchos días con nosotros, que lo íbamos a llevar a casa y pedía a dios que al menos me diera una semana con mi hijo, para que pudiera conocer su pieza y todas las cosas que teníamos para él. Fue terrible rogar por una semana de vida para tu hijo, era contra la naturaleza.........

Siempre sentí que Camilo era fuerte, se movía bastante y más aún después de saber su diagnostico, como queriendo decir, "mamá aquí estoy", "lucha por mi", "no te des por vencida"; siempre se movía justo debajo de mi mano, como queriendo tocarme, esa es una de las cosas que jamás olvidare.

Una de las frases que más me marco de la enfermedad de camilo fue "no compatible con la vida" acaso los minutos no cuentan?...............Así sean pocos minutos de vida, logran darnos una enorme lección de vida, dicen por ahí que no importa cuanto vivas, si no lo que dejas cuando te vas y lo que logras cambiar con tu existencia..................y para mi Camilo cambio mi vida por completo desde su concepción.


Aún faltando un mes para la fecha de parto llego el día un 7 de mayo de 2010, comencé con contracciones regulares a eso de las 12 del día.................a las 15 hrs. partimos a la clínica, las contracciones eran cada 15 minutos, ya a las 17 hrs me ingresaron a una habitación y mi matrona fue revisando si avanzaba el trabajo de parto, a las 18 hrs tenia alrededor de 6 cm. de dilatación, espere hasta que las contracciones fueran más intensa para irme a la sala de preparto y que me colocaran la epidural, a las 20:00 ingrese a preparto con 8 cm.
finalmente Camilo nació a las 21:41, fue un parto muy lindo, pero me puse a llorar cuando no lo oí llorar, me lo pusieron en mi pecho y el neonatologo que me explico que no teníamos mucho tiempo, que seria rápido su decenlace. Camilo solo vivió 2 horas y 44 minutos, nunca pudo respirar bien y a las 2 horas de vida comenzo con amnea hasta que finalmente dejo de respirar entre mis brazos..................esos 164 minutos lo tuvimos en nuestros brazos, lo besamos le dijimos cuanto lo amábamos y lo mas importante que descansara tranquilo porque nosotros íbamos a estar bien. Sabíamos el esfuerzo que había realizado por vivir solo para conocernos.
Solo mi madre y un amigo cercano lo conocieron con vida, yo no quería que lo vieran, no quería morbosos en la habitación, quería estar con él y mi marido, los tres solos.

La madrugada del 8 de mayo no podía dejar de pensar en camilo, si nos extrañaba o si estaba asustado, por encontrarse solo en un congelador que lo mantendría hasta el día de su funeral, acordamos con mi marido que seria el lunes 10 de mayo. El domingo me fui a casa, con las manos vacías.............salí llorando de la maternidad, pues no aceptaba no tener a mi hijo conmigo, sentía que todo era injusto en ese momento. El lunes fuimos a medio día a buscar a camilo a la clínica......subimos a neonatologia y muy amorosamente una enfermera nos ayudo a vestirlo, pues estaba congelado..............con mi marido lo peinamos, lo perfumamos, le pusimos una medallita, lo besamos y lo dejamos en el cajón, un hermoso cajón blanco..............le pusimos una hermosa jardinera amarilla.


Camilo solo vivió 164 minutos, los minutos mas cortos, pero a la vez los más valiosos e inolvidables que hayamos tenido. Minutos que nos confirmaron que vale la pena verlos nacer, sin importar si son minutos, horas, días o meses, la emoción y el amor que inspiran estos bebes hacen que cualquier dolor o sacrificio que pueda llegar con su partida no importe.


Antes le tenia miedo a la muerte, ahora lo veo como un lindo lugar lleno de paz y tranquilidad; el día que dios decida que llego mi momento caminare con ansias a reencontrarme con mi pequeño, mientras tanto intentare salir adelante con mi hijo Diego, mi marido y mi familia guiado por la luz que él encendió en nuestros corazones....una luz hecha con lágrimas de eterno amor.

3 comentarios:

  1. A ningùn mèdico le gusta dar malas noticias, generalmente el mèdico da buenas noticias y sabe como darlas, pero no estamos preparados para recibir, menos para dar una mala noticia. Siempre he dicho que cuando encuentras un bb con alguna alteraciòn el paciente, no te cree, siente que mientes, que no sabes, que se lo dijiste friamente, pero siempre he pensado, bueno, como se deberia, se debe o quiere el paciente que se de una mala noticia. Como Usted es una persona con sentimientos y yo un mèdico que no sabe dar una mala noticia me gustaria saber la forma en que Usted quisiera que uno ayudara a mitigar el dolor ante una noticia que no es agradable. Saludos.

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  2. Yo acabo de perder a mi quinto hijo, fue el 5 de Noviembre y vuestra historía es muy parecida a la nuestra. Nuestro pequeño también murió en mis brazos pero vivió tan sólo unos minutos. No sabemos si tenía la trisonomía 18 pues no nos hicimos la amniocentesis pero todo parece indicar que si.
    Aquí está la historia de su vida por si os apetece leerla:
    http://paideiaenfamilia.blogspot.com/2010/11/cuando-un-hijo-se-va.html
    Un fuerte abrazo.

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  3. Gracias no había visto estos comentarios

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